—Veo un inminente rechazo amoroso —pronosticó tajante.
viernes, 31 de agosto de 2018
Vete, destino
—Veo un inminente rechazo amoroso —pronosticó tajante.
jueves, 30 de agosto de 2018
La otra
Insistió en verme a las cinco en el hotel, eso despertó mis sospechas y estuve varias horas antes vigilando desde la ventana del bar.
A las tres la vi llegar, caminaba nerviosa, como buscando a alguien. Pude confirmar mis temores cuando por la misma vereda vi venir a… ¡mi esposa!
En una escena imposible se saludaron como grandes amigas, mi amante y mi mujer en la puerta misma del hotel. No hablaron mucho, se tomaron del brazo y entraron.
Eran las cuatro y media cuando salieron. Mi mujer paró un taxi, mi amante le tiró un beso y se dispuso a esperarme en el bar.
miércoles, 29 de agosto de 2018
Catarsis
¿Por qué escribo? ¿Y qué querés que haga? Vení, corazón, asomáte por la ventana. ¿Ves? El cielo está siempre gris. ¿Escuchás eso? Es la ciudad chillando de dolor. Es la gente que se muere y Dios no aparece por ningún lado.
Tanto desamor, tanta humedad del espíritu… no puedo soportarlo. Necesito cambiar las cosas, convertirme en superhéroe por un rato y salir por la ventana a soplar la tormenta. Agarrar la batuta aunque esté al rojo vivo, echar hacia atrás mi melena y transformar esos lamentos en melodías. Y después… después volver al pasado. A nuestra vieja casa, abrir la puerta, encender las luces y descubrir que todavía me amás y que nunca te fuiste.
lunes, 27 de agosto de 2018
Milagros
Enseguida se reunió una multitud a su alrededor. Ella los regalaba sin distinguir condición ni exigir limosna alguna. La llamaron santa, profeta, enviada del altísimo y otros mil apelativos y a sus creaciones les atribuyeron poderes divinos. Que su canto sanaba, que sus plumas eran talismanes sagrados...
Con el tiempo se fueron aburriendo de ella. Los pájaros comenzaron a reproducirse sin control y su canto permanente resultaba ahora molesto. El colmo se dio cuando algunos picotearon la cosecha. La tildaron de bruja y la desterraron.
Fue en el día anterior a la desaparición del pueblo.El día del ataque de los pájaros asesinos.
sábado, 25 de agosto de 2018
Parasoles Noemio
Bajo la sombrilla, la turista sueca comenzó a sentirse mal. Aún siendo embarazada primeriza, supo que ese dolor sólo podía ser una contracción y luego otra y otra....
—¡Alguien que me ayude, ya viene mi bebé!
El chico de las sombrillas acudió corriendo. Estaba aterrado pero tuvo presencia para dar el aviso y después se hizo cargo de la situación.
La mujer pujaba con la vista fija en las palabras escritas en la sombrilla.
El llanto del bebé se mezcló con la sirena de la ambulancia.
Se la llevaron tan rápido que no alcanzó a preguntarle su nombre, por eso su hijo se llama Noemio Larssen.
viernes, 24 de agosto de 2018
Desagravio
jueves, 23 de agosto de 2018
Género catástrofe
—No sé que pasa, este trasto no arranca.
—Muévalo, muévalo. ¡Viene el tren!
—Eso intento, ¿No ve?
Las barreras bajan encerrando al transporte, Las campañas de alarma comienzan a sonar. Cincuenta corazones se desbocan al mismo tiempo.
Una señora con un bebé grita histérica:
—¡Ya viene! ¡Abra las puertas, déjenos bajar!
—¡No responden! ¡No sé que hacer...!
Las puertas ceden momentos antes del desastre y los pasajeros huyen en estampida.
El tren se detiene a centímetros del bus.
Una voz metálica resuena entre los gritos:
—¡Corten!
La primera reacción de la gente es linchar al tipo del megáfono.
El reparto indiscriminado de dinero logra de a poco apaciguar los ánimos.
《El realismo es caro pero vale cada centavo》—reflexiona el director.
miércoles, 22 de agosto de 2018
Dos fantasmas
La divinidad, conmovida por su predicamento, decidió devolverlo al plano material en una segunda oportunidad.
Hoy es un gris oficinista, agobiado por las deudas, alternando entre la inmensidad de sus cuatro paredes y la soledad de las multitudes.
Con todo, lo peor son las añoranzas de un pasado que no alcanza a recordar.
martes, 21 de agosto de 2018
Zodíaco
Habían asignado su cumpleaños a la fecha de su adopción en lugar de su fecha de nacimiento. Justo a él que era fanático del horóscopo, que se jactaba de ser un ariano ejemplar: bondadoso e impulsivo, inconstante, apasionado y aventurero. Todo estaba mal, ¿la astrología era un fraude igual que su vida?
Reaccionó como pudo, el feroz desengaño lo hizo una persona irritable, desconfiada, rencorosa. Devino taciturno y reflexivo. Refugiado en su casa se afirmaba en la vida familiar, típico del canceriano que había descubierto ser.
lunes, 20 de agosto de 2018
Bulimia y anorexia
—Es cuando me pongo nervioso doctor, me entran ganas de comer y ya no hay quien me pare. Me llegan hasta el punto de lanzar y aunque mi patrón me tenga saltando todo el día detrás de sus ocurrencias, cada vez estoy más gordo, ya lo ve.
—¿Y porqué tantos nervios?
—El trabajo, llevo un ritmo de no aguantar... ¡Es de locos!
—Debería comentarlo con su jefe. A veces, un jefe apacible y calmado proyecta demasiadas expectativas en su empleado de confianza sin advertir el daño que le causa.
—¿A Tarzán pedirle ropa? De eso nada, doctor. El tío también se crispa de los nervios y come tanto o más que yo.
La diferencia es que cuando nadie le ve, va y vomita todo a escondidas. Por eso está más flaco que la parca. Además, nunca me escucha. La semana pasada le digo: "Patrón, que esos no son gigantes, son molinos de viento…”
domingo, 19 de agosto de 2018
Poderoso Caballero
sábado, 18 de agosto de 2018
Carrera de cucarachas
A mí me dan asco las cucarachas, por eso me dejan dar la partida y anunciar a los “corredores” anotados.
—¡Señores, la carrera va a comenzaaaaar! En el carril uno tenemos a Rapidina, por el segundo viene Diarrea, a su lado corre la campeona Belleza Negra y en el último andarivel viene…¿Alfredo? ¿Que clase de nombre es ese para una cucaracha?
—¿Nunca te platiqué que mi papá nos abandonó de chicos?
viernes, 17 de agosto de 2018
Cabo Cañaveral
—Hey Buzz, ¿quieres oír una buena anécdota de mi infancia en Ohio?
—Aprovecha a contarla por última vez Neil; estamos viajando a la luna y esa será la única anécdota en tu vida.
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jueves, 16 de agosto de 2018
Lenguaje inclusive
—Que te serenes.
—Me tenés verde de pretender que te espere.
— Entendeme Pepe.
—Te creés rebelde. ¿Qué tenés en mente?
—Que me respetes, ¡Forro!
miércoles, 15 de agosto de 2018
Tu amigo fiel
Esperar hasta el último segundo y esconderme bajo tu cama.
Colgar desnudo del alféizar de tu ventana, total nadie me ve.
Porque solamente tú calculas mi jugada, intuyes mi visita, hueles mi perfume.
Yo puse esa alarma en tu cabeza, que machaca todo el tiempo con que algo va mal.
¿Otro amor que se va, que importa? Si me tienes a mí, el único que nunca te abandonará.
martes, 14 de agosto de 2018
Aquel desconocido
Veinte años después, en la reunión de ex alumnos, la jerarquía que dominaba la escuela sigue vigente.
El tano Mainardi siempre fue un segundón, un pelagatos y si nosotros lo registrabamos era sólo porque la hermana estaba para el infarto, nada más.
El Turco, en cambio, era de los nuestros, los que manejabamos la movida desde el fondo del aula, los reyes del patio, admirados por las chicas.
No es extraño que, al saludarlo, el Turco no lo reconozca; y eso que Mainardi está igualito: Gordito, petiso, coloradón...
No hay caso, el Turquito no lo saca, Mainardi insiste.
Me conmueve verlos así, tengo que intervenir.
—Turco, ¿no te acordás? Este es el tanito Mainairdi, que iba con nosotros a gimnasia. Turquito...el hermano de la Romi...
Los dos me miran de arriba a abajo y preguntan a coro:
—¡¿Y vos quién sos?!
lunes, 13 de agosto de 2018
Fruta seca
—Ay, como me duelen las pasas... ―murmura mi abuelita con voz queda.
—¿Las pasas? ―pregunto.
— Algo, hijo. Cualquier cosa que me quede dentro debe ser como una pasa, ¿qué no?.
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sábado, 11 de agosto de 2018
Soporte
—¡Estos son libros! Pesados, resistentes y con ese sonido único al entrechocar... ¡no me vengan los jóvenes de ahora con esos papiros manchados con tinta!
viernes, 10 de agosto de 2018
La partida
Recuerdo la tienda de sombreros del tío Orlando, recuerdo el olor a solvente y recuerdo uno de mis cumpleaños, cuando me escapé de la fiesta con mi primo. Jugamos a los besos en la trastienda, escondidos entre las cajas redondas y brillantes. En la penumbra vi moverse una sombra que resultó ser mi propio reflejo en el espejo del probador. Reí al ver mi cara de tonta y también podría reír ahora, pero las lágrimas arrasan mis mejillas.
Se rompe el hechizo. Vuelvo a la triste realidad donde soy una amenaza para algunos y al mismo tiempo estoy en peligro inminente. La niña se fué, mi cara vencida y arrugada me mira desde la foto del pasaporte que tiembla en mi mano. Desde la cubierta miro el horizonte, la línea de la costa va desapareciendo y me hundo de a poco en el exilio.
jueves, 9 de agosto de 2018
Malas y buenas / Caracas
Al regresar con mis hermanos de la escuela, encontramos a mamá con la mirada empañada.
—Tengo una mala noticia —me dijo —tus patitos...se escaparon anoche por el fondo.
Salí corriendo al corral con el corazón en un puño. Un agujero en el tejido de alambre me confirmaba esa vaina.
Volví triste y arrecho a la casa, pero se me pasó enseguida.
Mamá me esperaba con una sorpresa. Después de muchos días de andar pasando filo, por fin papá había mandado una plata del mes atrasado y ella nos preparó su arroz con pollo, mi comida favorita desde carajito.
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miércoles, 8 de agosto de 2018
¡Abajo el tirano!
El pintor del reino, confesó tras una larga sesión de tortura.
—¡La pena será ejemplar! —pontificó el rey. —Deberá limpiar todas las paredes primero, luego...¡cortadle las manos!
Eso supuso el fin del asunto aunque el soberano, temiendo una revuelta popular, se encerró en el castillo.
Al día siguiente, las pintadas volvieron, esta vez dentro de su propia habitación.
Ya no había garantías para el rey. El miedo lo perseguía en forma de terribles pesadillas donde las manos cortadas del pintor venían a ahorcarlo.
La tercera noche despertó gritando y salió corriendo por la habitación. En su loca huida cayó por el balcón de los aposentos reales.
Durante los funerales, el príncipe heredero lloró y juró venganza. Nadie prestó atención a las manchas de pintura en sus manos.
martes, 7 de agosto de 2018
Observación
lunes, 6 de agosto de 2018
Una historia perdida
—¿Qué ofreces a cambio? —preguntó la hechicera que custodiaba el oasis.
—¡Respetaré tu vida, maldita seas! —contestó alzando contra ella su alfanje.
En silencio, la mujer encorvó la espalda y llenó un pequeño cántaro en el pozo.
El forastero soltó el alfanje y le arrebató el recipiente de las manos. Bebió con desesperación ante la mirada satisfecha de su anfitriona. Descubrió la trampa cuando sintió las piernas agarrotadas y una parálisis que subía por su cuerpo, pero antes de perder totalmente la movilidad, alcanzó a aferrar a la bruja por el cuello y volcar en su garganta el líquido restante.
Muchos, muchos años después, una caravana de mercaderes que deambulaba perdida en el desierto, llegó por casualidad al oasis y encontró en la entrada a los dos antiguos enemigos. Se habían convertido en estatuas de piedra mientras forcejeaban abrazados.
Aquellos mercaderes agradecidos, equivocaron la escena y bautizaron al lugar “El oasis de los amantes”.
sábado, 4 de agosto de 2018
En simultáneo
En el mundo de los vivos reinan el llanto y la tristeza cuando un médico les informa la terrible noticia.
viernes, 3 de agosto de 2018
jueves, 2 de agosto de 2018
Por el camino
El paquete, chiquito y pesado, se me escurría bajo el brazo traspirado. Me ganó la curiosidad, y me animé a abrirlo. Adentro había un fierro y guita. Aguanté el escalofrío unos pasos, ni siquiera dejé de caminar. Me guardé guita, me calcé el fierro y me volví a matarlo al Cholo.
miércoles, 1 de agosto de 2018
Golpe de suerte
—Eh, es una "Rayo veloz" ¿Cómo la conseguiste?
—Una corazonada, después te cuento...lo que importa es que ahora tengo bicicleta como ustedes —contestó ruborizándose.
Advertí su labio partido y su mejilla amoratada. Cuando estuvimos solos le pregunté qué pasó.
—Te cuento pero queda entre nosotros ¿eh?
Prometí guardar el secreto.
—El viejo me mandó a lo del polaco a jugar a la quiniela, al veintidós, cien pesos a la cabeza y a los premios. Por el camino crucé un gaucho a caballo, ¿raro no? En la agencia estaba el tano Cavalli tomando Legui con el polaco, jugaban al ajedrez.
—¿Y con eso qué?
—¿No entendés, hermano? El destino me estaba avisando, jugale al caballo. Le jugué todo al cero veinticuatro, a la cabeza.
Cuando el viejo vio la papeleta me cagó a palos. Le dije que me confundí, igual me fajó, para que aprenda.
—¿Y la bici?
—Ahí va. Al otro día el polaco vino a pagar. ¡Salió el veinticuatro en la nacional y la provincia!
El viejo me besaba y lloraba. A la tarde volvió con la bici de sorpresa...
El Rulo pedalea a toda velocidad y levantando un brazo grita: —¡Jaióooo Silver!