El que sufre un desengaño lo que quiere es olvidar, según me cuentan. ¡Yo qué sé!
Mi método, según me cuentan, consistía en recorrer los bares bebiendo a lo beduino, ¡yo qué sé!
La contra es que tenía mal vino, según me cuentan, y armaba escándalo y una vez los gorutas de un boliche me arrojaron a la calle, ¡yo qué sé!
Y de ahí la conclusión, digo la confusión, digo la contusión. Contusión grave, según me cuentan, con pérdida de la memoria ¡yo qué sé!
Y nadie sabe decirme por qué sigo llorando todas las noches..
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